ETNOGRÁFICO
Los principales elementos etnográficos que podemos encontrar en el municipio giran en torno al aprovechamiento del agua (acequias, estanques, lavaderos, molinos, pozos o galerías) y a las explotaciones agrícolas (casas, corrales, cuevas o alpendres). Siendo el agua una de las principales riquezas del municipio de Valleseco, desde muy pronto se construyeron diferentes acequias para el transporte de agua desde galerías o presas. Las más importantes que todavía se conservan son las Acequia de la Cumbre, la Acequia de Crespo o la Acequia Honda. En su recorrido se construyeron diferentes elementos para el aprovechamiento del agua por la población. Los pilares eran tomas comunes de donde todos los vecinos se abastecían, mientras que las fuentes eran manantiales naturales de agua. Los lavaderos estaban hechos en piedra y en ellos se podía lavar la ropa o tomar cierta cantidad de agua con cacharros para el uso del vecindario. Aún hoy en día siguen usándose diariamente por las mujeres. No ocurre lo mismo con los antiguos molinos que había distribuidos a lo largo de la Acequia Honda, perteneciente a la Heredad de Aguas de Arucas y Firgas, de los que tan solo quedan algunos vestigios.
De especial interés es el Conjunto etnográfico de El Molinete. En el pasado se situaban aquí dos molinos, el molino del Molinete y el Molino de Abajo, construídos a finales del siglo XIX. Se movían con la fuerza de las aguas que bajaban por la Acequia Honda, recogidas del Barranco de la Virgen y llevadas hasta Arucas y Firgas. Hoy en día, se pueden ver aún la acequia y los peldaños por donde subía el “acequiero” para revisar el estado de la acequia y, delante de ésta, la casa del molino del Molinete, recién restaurado y la construcción circular del cubo. Después están el lavadero y, al final de éste, el otro cubo perteneciente al Molino de Abajo, que estaba situado por debajo. Ubicación en el mapa
Otros elementos de interés etnográfico son las Ermita de San Luís Gonzaga en Valsendero y la Ermita de la Virgen de la Silla en Caserón. La ermita de San Luis Gonzaga fue bendecida el 28 de Junio de 1925 por el cura párroco de San Vicente Ferrer, D. Juan Marrero Díaz, comisionado por el Sr. Obispo y bajo la advocación de la Virgen de la Milagrosa. Fue construida con el dinero reunido de las pequeñas limosnas de los vecinos y la valiosa aportación de D. José Acosta. Es parroquia independiente desde 1943. Ubicación en el mapa.
En la zona de Caserón hay muchos ejemplos de casas antiguas canarias. Una de ellas es la Ermita de la Virgen de la Silla, que data de mediados del siglo XIX. Pertenece a la familia Rodríguez Pérez, a la que se conoce como la familia de los curas, porque había en ella varios curas. De ahí que haya una pequeña capilla en la que oían misa los vecinos del lugar y los peregrinos que venían por el camino real a pagar sus promesas a la Virgen del Pino en Teror. Ubicación en el mapa
Otra costumbre ancestral de interés etngráfico es el Rancho de Ánimas, que se celebra en el barrio de Madrelagua a mediados de Febrero. Se escoge un sábado por la tarde para la actuación de un grupo de tocadores, que se reúne para cantar y recaudar dinero entre los vecinos con el objetivo de ofrecer misas a las ánimas. La mayoría son ancianos que mantienen la tradición y alguno de sus hijos que ha heredado su interés. Vienen de San Isidro, Arbejales y Madrelagua y en todos estos pagos, así como en otros de Teror, siguen el mismo ritual centenario que ha resistido hasta hoy el paso de los años. Para saber más de esta tradición puede entrar en las Rutas etnográficas del Rancho de Ánimas.
Comentarios
Anónimo
Mar, 15/06/2010 - 21:39
Hace poco estuve por el
Hace poco estuve por el Molinete en otra escalera muy parecida a ésta. Me encanta el sitio. Saludos.