La Acequia es un alojamiento diseñado para disfrutar de un entorno único en el marco del Parque Rural de Doramas en Valleseco. Confort y diseño se dan la mano en una moderna instalación, logrando que una estancia este establecimiento sea un auténtico retiro de la rutina diaria.

La casa, adquirida por sus propietarios en 1997, data de finales del siglo XIX. La parte más antigua de la edificación, aquella en la que se encontraban los establos (alpendre en Canarias) y el granero, así como el patio principal, han sido rehabilitados y adaptados siguiendo modernos estándares de calidad y confort.

En La Acequia os encontrareis con 1 dormitorio de dos camas en una preciosa habitación con chimenea y Tv. En otra de las habitaciones encontrareis un sofá cama que se eleva y deja al mismo nivel dos camas. Dispondrá también de baño completo con bidet y ducha. El preciosos salón es la zona preferida de nuestros huéspedes por su gran tamaño, zona de lectura y televisión, sofá cama, reproductor de DVD y canales de televisión. Seguidamente se encontrará con una cocina completa con zona de comedor. En la cocina equipada tenemos microondas, cafetera, útiles y menaje. La zona de comedor es amplia para que puedan usarla a cualquier hora del día o si lo prefieren, también podrán reunirse a cenar bajo las estrellas en la terraza exterior con barbacoa y horno de leña.

La zona estrella de la vivienda es el hermoso espacio destinado al relax. En dicho espacio se encontrará con una cubierta acristalada cerrada, que genera un microclima cálido durante todo el año, refrescada constantemente por vaporizadores de agua, que harán bajar la temperatura en los días más calurosos. Báñese y disfrute en el completo Spa de varias plazas, con funciones de aromaterápia y 53 chorros jet para masajearle constantemente. Si desea tomar el sol, podrá hacerlo en esta zona y utilizar la ducha exterior.

No podrá dejar de contemplar la belleza del Orquidario exterior, bañado con una acequia que recorre toda la fachada exterior.

La disposición de la finca ha permitido crear largos parterres con flores, hierbas medicinales y aromáticas; dos espacios con césped en uno de los cuales se ubica una fuente con un banco en el que disfrutar del sonido del agua y observar la infinidad de pajarillos que habitan en los árboles de la finca.