Pico de Osorio

Si continuamos a la derecha por la carretera adyacente a La Laguna, pronto aparecerá ante nosotros la estampa del inconfundible Pico de Osorio, antiguo cráter volcánico que se alza majestuoso con sus 968 metros de altitud, permitiéndonos contemplar los pueblos colindantes de Teror, Firgas, Arucas y, más allá, el Norte isleño y la capital. La entrada al sendero de ascenso hasta la cima lo encontramos a la derecha,  justo cuando la carretera hace una curva pronunciada. La pendiente de subida obliga a detenerse de cuando en cuando, permitiéndonos reparar en un paisaje arbolado de fayas, brezos y laureles, obtenido gracias a intensas labores de reforestación que pretenden recuperar la vegetación endémica.